Sentir de un poeta
El amor es cual semilla
que siempre pare una rosa.
Es rima de verso, es prosa,
en letras de una cuartilla.
Es sol que de noche brilla
cual filosa bayoneta.
Es buscar siempre una meta
para narrar emociones,
pues de amores y traiciones
suele escribir un poeta.
Con pasión él se enamora
cada vez que un verso escribe;
su pecho un dolor concibe
pues en cada letra llora.
Y esa lágrima que aflora,
que le arruga el corazón,
aunque cause desazón
y el alma le haga pedazos,
él recoge los retazos
y plasma su inspiración.
Pero a nadie ha de importar
eso que siente un poeta,
un alma de pluma inquieta
va escribiendo sin parar.
Y si tú puedes llorar
leyendo su inspiración,
pronto verás con razón
que en su sublime condena,
va entretejida una pena,
¡hay lágrima y corazón!
Miguel Ángel Silva